¿Por qué necesito una espuma anti-viento en mi sonómetro?
Las espumas anti-viento son complementos muy útiles para nuestros equipos de medición de ruido y existen varias razones por las que se debe hacer uso de estos protectores durante las mediciones acústicas:
- Reducen los efectos del viento y movimiento del aire a través del micrófono
- Protegen al micrófono de desperfectos
- Mantienen la cápsula del micrófono limpia
1. Reducen los efectos del viento y movimiento del aire a través del micrófono
Las cápsulas de micrófono son muy sensibles y se han diseñado para reaccionar a los cambios en la presión del aire. Dichos cambios pueden ser mínimos cuando los niveles de ruido están sobre los 20dB o muy notables cuando los niveles están a 140dB.
Es un verdadero reto fabricar una cápsula que sea sensible a todos esos niveles diferentes y por ello los micrófonos son susceptibles al viento.
Cuando se realizan mediciones en exteriores, se debe usar una esponja anti-viento para reducir tanto como sea posible los efectos del viento en las mediciones sin que los resultados se vean afectados.
El protector anti-viento que se entrega con nuestros sonómetros se ha diseñado para permitir los cambios en la presión del aire y también para reducir las turbulencias que puede crear el viento.
Si no se utiliza la espuma no se asegura que se esté midiendo el ruido que se desea, sino que se medirá el ruido del viento impactando en el micrófono.
Como ejemplo, realizamos algunas mediciones rápidas e imprecisas con un ventilador pequeño de 30cm y un sonómetro optimus. Hay que tener en cuenta que este tipo de mediciones no son de carácter científico y solo se realizaron para exponer un ejemplo.
El sonómetro optimus se colocó en un trípode y la distancia entre el instrumento y el ventilador era de 0,5m.
Después de la correspondiente calibración, realizamos cuatro mediciones. También llevamos a cabo una medición del ruido de fondo para verificar que los niveles de ruido ambiente sin el ventilador en marcha eran consistentes y a más de 30dB por debajo del ruido del ventilador.
Las mediciones se hicieron de la siguiente manera:
- Sin espuma anti-viento y con el instrumento enfrente del ventilador
- Sin espuma y con el instrumento a 90 grados respecto al ventilador (hicimos esta prueba para ver cuál era el nivel de ruido del ventilador)
- Con una espuma anti-viento estándar de 90mm que se envía con el optimus
- Con una espuma anti-viento de alta calidad para mediciones exteriores, de 90mm y con revestimiento higroscópico
- Medición 1 – 74.7dB(A) – Leq durante 20 segundos
- Medición 2 – 52.4dB(A) – Leq durante 20 segundos
- Medición 3 – 53.8dB(A) – Leq durante 20 segundos
- Medición 4 – 53.8dB(A) – Leq durante 20 segundos
Estas mediciones son simples y primitivas, pero está claro que las dos espumas anti-viento hacen que los niveles de ruido del ventilador se reduzcan a algo más de 20dB(A).
El ruido medido sin espuma anti-viento es la combinación del ruido del mecanismo del ventilador, es decir, el del motor y el ruido aerodinámico de las aspas al girar, y el ruido generado por el aire que se mueve e impacta en el micrófono.
Lo que interesa de estas pruebas es el ruido del ventilador y no el del aire. Usando una espuma anti-viento reducimos los efectos de las turbulencias sobre el micrófono.
2. Protegen al micrófono de desperfectos
La cápsula del micrófono de los sonómetros es la parte más importante del instrumento. Es el micrófono lo que convierte los cambios de presión barométrica a una señal eléctrica. Si esta parte delicada de su sonómetro se daña de alguna manera las mediciones serán incorrectas.
La espuma anti-viento protege el micrófono de cualquier golpe o caída cuando se transporta el sonómetro o cuando se realizan mediciones.
Siempre es bueno utilizarlo incluso en interiores, ya que es donde se puede estropear o dañar el micrófono.
También debe usar la protección si el sonómetro se coloca en un trípode.
No se olvide de quitar la espuma antes de calibrar el sonómetro. Esto puede sonar algo obvio, pero hemos recibido llamadas preguntándonos cómo calibrar el instrumento con la espuma colocada.
3. Mantienen la cápsula del micrófono limpia
Las partes extraíbles de una cápsula de micrófono son muy delicadas y muy ligeras de peso. Cualquier contaminante del fino diafragma* de micrófono, como gotas de agua o suciedad, puede afectar a la manera en la que el micrófono y el sonómetro medirán el ruido.
Queda claro que la espuma anti-viento protege el micrófono de cualquier contaminante potencial y ayuda a que las mediciones sean precisas, ya que esa fue la intención al diseñarlo.
La mayoría de micrófonos que se usan en los sonómetros llevan una rejilla sobre el diafragma que lo previene de cualquier daño, pero la espuma anti-viento nos dará una mayor protección.
*El diafragma es la fina y ligera lámina situada encima del micrófono que se mueve con los cambios en la presión del aire.
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